lunes, 7 de agosto de 2017

Balada del quiebre.


   Hoy no quiero escribir.

   Hoy no quiero escribir,
porque no quiero perder esta
marejada tremenda
que choca constante contra
las rocas
de mi cabeza.

   Hoy no quiero escribir,
no vaya a irse volando
el incesante colibrí que me
ajetrea.

   Hoy no voy a escribir...
porque despertar
me aterra.

   Aunque debería escribir,
porque ya quebré lo que
era.

   Tal vez hoy escriba,
para recobrar a presente
poco a poco
mis piezas.

   Sí, hoy escribo,
porque no llegué hasta aquí
para desmembrar
mis anhelos
con el primer colibrí
que, aunque nuevo, me vuela.

   Y, despierta mi pluma,
quizá pueda
avanzar ya sin miedo
y completa.

No hay comentarios:

Publicar un comentario