domingo, 31 de mayo de 2015

Y de noche se me abre la piel.

Cada noche.
La noche me abre la piel.
Las sombras familiares se ciernen,
y crean mi caverna.
Y yo, esclava de mi rutina,
caigo en las redes de la pantalla cuya única luz
ilumina mi rostro. Y no duermo.
Es tarde
siempre se me hace tarde.
Porque tengo un sol.
Pero tengo miedo a aferrarme a él porque ya me quemé
una vez.
dos veces.
Si vivir es esta experiencia tan compleja
la muerte debe de ser muy nada.
muy vacía.
Son los extremos los que matan,
por que son los bordes
y de los bordes, la gente se cae.
Cada noche.
extraño querer hacer el amor con mi soledad.
añoro estar enamorada de ella.
Se me abre la piel,
pero no hay emociones
Y esa, es de las peores.

miércoles, 27 de mayo de 2015

Aceite de Caléndula.

   Era más de medianoche,
   y su respiración ya estaba tornándose plácida.
   Y con las sábanas hasta el cuello,
   y medio somnoliento,
   me quitó las lágrimas y aplacó mis miedos a besos.

   Pequeños, cortos,
   como rayos de luz deslizándose entre las hojas.
   Allí, me dijo que me quería,
   consciente e inconscientemente.
   ofreciéndome con ello un lienzo blanco
   en lugar de pesadillas.

   También me dio un amanecer tibio,
   mucho más dulce que otros.
   Y con su marcha ordené por fuera,
   siendo, el eco, el orden de mis órganos e ideas,
   que aún permanecen vagas.

   Mi voluntad se dejó domesticar hoy,
   y pude volver a casa...
   Pero hoy es como si el reloj no tuviese arena.
 
 

jueves, 21 de mayo de 2015

Cesárea.

Hola, ¿quién eres y porqué te pareces a mi?
He percibido que hablamos el mismo idioma, pero no te entiendo.
Veo que tienes un carácter extremista, y un temperamento a flor de piel.
No resultas agradable.
Tu inseguridad y timidez te hace parecer fría e irrespetuosa.
Y te he visto llorar mil veces. Se te hincha la cara y la nariz se pone colorada.
¿Porque piensas tanto? la autocompasión no lleva a ningún lado, ¿sabes?
Todo tu talento se ve mermado cuando no confías en ti.
Tu cuerpo es muy sabio a veces, pero no lo escuchas.
He visto que tu esencia es complicada.
Me han contado que te gusta las amapolas porque son flores hermosas y silvestres, y que así te ves tú, salvaje.
Tienes miedo a perder la libertad.
Tienes miedo.
Pero eres fuerte... lo he visto, lo he visto cuando has estado en lo peor y más oscuro de tus propios escombros, y has sabido ir limpiando poco a poco, con esfuerzo, con lágrimas, las cenizas que te cubrían.
Deberías quererte un poco más.


Este espejo está sucio... tengo que limpiarlo.

lunes, 18 de mayo de 2015

A mediados de estrés.

A veces olvida la memoria el cuerpo nuevo.
No entiende que no se entienden,
y carece de paciencia de madre.

A veces el pecho se harta de no ser escuchado.
y se anuda y protesta.
Quizás no lo entendemos porque sale por los ojos
en tibio reclamo.

A veces la rutina produce ceguera,
sordera,
y te quita la sensibilidad en los dedos.

A veces no importa cuántos libros tengas
que no encuentras palabras.
Y otras da igual las palabras,
mientras pesen dentro.

Hay veces que quiero escribir poesía,
pero no encuentro el puto ritmo.
Y digo tantos tacos que ya no parezco un hada.

A veces se es tan complejo
que hay que escribirse cartas a uno mismo
y releerlas un tiempo después,
con la cabeza fría.

A veces no hay tiempo,
tan sólo suspiros cansados.
tan sólo silencios dormidos.

A veces no hay una recompensa 
y ni la miel más dulce
te quita el amargo sabor de las hiervas,
hiervas que tú te obligaste a beber.

Hay veces que no reconoces a la del espejo.
Y sus ojos se tornan tan tristes...
A veces ni el dulce te aplaca.

A veces todos los oídos están sucios.
A veces las lenguas están quemadas.
A veces el corazón está seco.
A veces conviertes en polvo lo que tus manos tocan.
A veces tu frente está fría.
Y tu entrepierna sellada.

A veces no hay razón que valga, para una sensibilidad no entendida.